domingo, 16 de diciembre de 2007

EL SECRETO DE LAS AGUILAS

EL SECRETO DE LAS AGUILAS

El águila es el ave con mayor longevidad de esas especies.
Llega a vivir 70 años, pero para llegar a esa edad, a los 40 años debe tomar una seria y difícil decisión.

A los 40 años sus uñas están apretadas y flexibles, con las cuales no consigue tomar a sus presas de las cuales se alimenta.
Su pico, largo y puntiagudo, se curva apuntando contra el pecho.
Sus alas están envejecidas y pesadas; sus plumas gruesas. ¡Volar se hace ya tan difícil!

Entonces el águila tiene solamente dos alternativas: morir o enfrentar un dolorido proceso de renovación que durará 150 días.

Este proceso consiste en volar hacia lo alto de una montaña y quedarse ahí, en un nido cercano a un paredón, en donde no tenga necesidad de volar.
Después de encontrar ese lugar, el águila comienza a golpear su pico contra la pared hasta conseguir arrancarlo.
Luego debe esperar el crecimiento de uno nuevo con el que desprenderá una a una sus uñas.
Cuando las uñas nuevas nacen, comenzará a desplumar sus plumas viejas una a una.
Después de cinco meses, sale para su vuelo de renovación y a vivir treinta años más.

Situaciones parecidas nos suceden en la vida.

Hay momentos en que parece que ya hemos dado en nuestro trabajo, familia, escuela, comunidad, todo lo que teníamos; pareciera como si hubiéramos agotado nuestra creatividad y que ya no tenemos mucho que aportar.
Nuestra vida suele verse gris y envejecida. Estamos en un punto de quiebre: o nos transformamos como las águilas o estaremos condenados a morir, aunque nuestro corazón siga latiendo.

La transformación exige, primero, hacer un alto en el camino; tenemos que resguardarnos por un tiempo.

Mirar hacia adentro y comenzar un proceso de renovación, aunque duela.

Solo así podremos desprendernos de esas viejas uñas y plumas para continuar un vuelo de renacimiento y de victoria.

7 comentarios:

Profesora Blanca "Sembrando Consciencia" dijo...

que bueno tu mensaje Sergio, pero lo mejor que tiene es precisamente eso poder darnos cuenta, la vida nos aplasta y solo tiene tiempo para devorarla en un instante. Que bueno que podemos compartirla y darnos cuenta de nuestra propia existencia.

Maria Julieta Barro dijo...

Che, Sergio: ¡molesta leer cosas asi!! Decime este hermoso cuento te da garantia?
No es facil hacer un alto en el camino, pero lo otro es peor. Da la sensacion de que si no elegis se pasa la oportunidad, no??
Es indiscutiblemente bello, sin duda. Creo que movilizante tambien.
La molestia es por la resonancia. Esta buenisimo. Julieta

Silvina Carraud dijo...

Comprendo y comparto estos sentimientos. Para quienes llegamos a esta etapa de la vida, puede pasarnos que necesitemos re-pensarnos, parar, mirar hacia atrás. Y volver a empezar, que aún no termina el juego... queda mucho por andar, como dice la canción. Rescatar la experiencia y cambiar la mirada, enfrentar nuevos desafíos. Lo bueno está todavía por venir.

Mariano dijo...

Hermoso mensaje, sobre todo en estos tiempos que corren. Pareciera que a veces es cuestion de mirar a nuestro alrededor para aprender, los bichos, el ritmo vegetal, etc. Un abrazo y me sumo a lo de Silvina..."lo bueno esta todavia porvenir"

Escritores de Basavilbaso dijo...

¡Que bueno sería que nuestras autoridades educacionales pudieran entender esto!
Hacer un verdadero alto en el camino. Poder estudiar, reflexionar, producir, profundizar,interactuar con los colegas en la facultad, tirar las uñas viejas (que ya no rascan ni la guitarra), quitarnos el pico (que muchas veces es de loros), cambiar las plumas (negras vestiduras de viejos) y salir a volar con TODO NUEVO.
¿Llegará Máximo, Mariano, Nacho, ese día?
Hoy tenemos solamente 6 días de permiso máximo antes de cada examen. Es poco ¿verdad?

Máximo Chaparro dijo...

¡Grande tu texto!, Sergio. Y con los comentaristas aprendemos más aún. Y con algunos, ademas, yo me río. Gracias, Sofía de Lourdes, por el exocet (¿así se escribe?) ...al decir: "Qué bueno sería que nuestras autoridades educacionales...". Me has hecho reír...y pensar como sacarme estas uñas viejas. Abrazos. Máximo

Escritores de Basavilbaso dijo...

En ocasiones pienso si en realidad desde el Ministerio de Educación pensarán que capacitarse, actualizarse se hace con coursos de 40 hs. y evaluación (dudosa). ¿Serán tan estrechos de mente o tienen otros objetivos para con nosotros?
Sin continuidad pienso que no hay capacitación.
¡Y pensar que muchos de nuestros colegas llegan a cifras siderales, 90 puntos en credenciales!
¡CAMBIOS POR FAVOR!